Si digo Brian K. Vaughan, definitivamente a muchos le va a resultar un nombre conocido, sobre todo a aquellos que han disfrutado con sus guiones en comics como Y: The Last Man, Los Leones de Bagdad o en series de televisión como Lost.
Pues bien, este señor, con excelentes capacidades para crear buenas historias, está detrás de uno de los comics más interesantes que he leido estos últimos meses, me refiero a Ex Machina, y sí, hace algún tiempo ya llegó a su fin, pero yo acabo de terminar de leerlo hace poquísimo.
Ex Machina cuenta la historia de Mitchell Hundred, un ingeniero que mediante un accidente obtiene el poder de comunicarse con las máquinas, lo que lo lleva a convertirse durante algún tiempo en el superhéroe conocido como La Gran Máquina, sin embargo, sus incursiones nunca terminaban de la mejor manera, su falta de entrenamiento e inexperiencia superaban sus buenas intenciones, logrando el cometido de combatir el crimen, pero a un alto costo para la sociedad (destrozos de propiedades, inocentes heridos, etc.). Luego de esta experiencia medianamente satisfactoria, Hundred decide continuar velando por el pueblo pero sin utilizar sus poderes, por lo que decide convertirse en alcalde de New York.
Hundred logra la alcaldía ya que goza de amplia popularidad entre el pueblo neoyorquino, quien lo reconoce como la Gran Máquina, quien, dentro de la ficción de la historieta, impidió que el segundo avión se estrelle contra la segunda torre del World Trade Center.
Es así que la narración del comic juega entre el "presente" de Mitchell Hundred como alcalde de New York y flashbacks de sus incursiones como la gran máquina, las mismas que le han dejado lecciones para sus decisiones como alcalde. Lo interesante es la manera en que se presentan problemas cotidianos de una autoridad de este tipo, que tiene que atender asuntos sobre la legalización del consumo de marihuana, el matrimonio gay, protestas al puro estilo "indignados" y demás asuntos, combinandolos con otros temas que van más allá y que requieren de la acción de Hundred, no como alcalde si no como un superhéroe, lidiando con supuestos bomberos asesinos, amenazas arabes, un atentado contra el papa y muchas, muchas cosas más.
En conclusión, Ex Machina es narrada excepcionalmente por Vaughan y muy bien dibujada por Tony Harris, cada arco argumental tiene la capacidad de atraparte por la manera en que se enlaza el presente y el pasado del personaje, por que se tratan temas políticos de una manera desenfadada y crítica, y porque está el elemento del superhéroe realista, aquel que actúa dentro de la medida de sus posibilidades con limitaciones y errores. Eso sí, no todo es bello, debo decir que la serie sobre el final decae un poco, ya no llama tanto la atención, pero al haber leido tantos tomos, se merece llegar hasta el final.
Pues bien, este señor, con excelentes capacidades para crear buenas historias, está detrás de uno de los comics más interesantes que he leido estos últimos meses, me refiero a Ex Machina, y sí, hace algún tiempo ya llegó a su fin, pero yo acabo de terminar de leerlo hace poquísimo.
Ex Machina cuenta la historia de Mitchell Hundred, un ingeniero que mediante un accidente obtiene el poder de comunicarse con las máquinas, lo que lo lleva a convertirse durante algún tiempo en el superhéroe conocido como La Gran Máquina, sin embargo, sus incursiones nunca terminaban de la mejor manera, su falta de entrenamiento e inexperiencia superaban sus buenas intenciones, logrando el cometido de combatir el crimen, pero a un alto costo para la sociedad (destrozos de propiedades, inocentes heridos, etc.). Luego de esta experiencia medianamente satisfactoria, Hundred decide continuar velando por el pueblo pero sin utilizar sus poderes, por lo que decide convertirse en alcalde de New York.
Hundred logra la alcaldía ya que goza de amplia popularidad entre el pueblo neoyorquino, quien lo reconoce como la Gran Máquina, quien, dentro de la ficción de la historieta, impidió que el segundo avión se estrelle contra la segunda torre del World Trade Center.
Es así que la narración del comic juega entre el "presente" de Mitchell Hundred como alcalde de New York y flashbacks de sus incursiones como la gran máquina, las mismas que le han dejado lecciones para sus decisiones como alcalde. Lo interesante es la manera en que se presentan problemas cotidianos de una autoridad de este tipo, que tiene que atender asuntos sobre la legalización del consumo de marihuana, el matrimonio gay, protestas al puro estilo "indignados" y demás asuntos, combinandolos con otros temas que van más allá y que requieren de la acción de Hundred, no como alcalde si no como un superhéroe, lidiando con supuestos bomberos asesinos, amenazas arabes, un atentado contra el papa y muchas, muchas cosas más.
En conclusión, Ex Machina es narrada excepcionalmente por Vaughan y muy bien dibujada por Tony Harris, cada arco argumental tiene la capacidad de atraparte por la manera en que se enlaza el presente y el pasado del personaje, por que se tratan temas políticos de una manera desenfadada y crítica, y porque está el elemento del superhéroe realista, aquel que actúa dentro de la medida de sus posibilidades con limitaciones y errores. Eso sí, no todo es bello, debo decir que la serie sobre el final decae un poco, ya no llama tanto la atención, pero al haber leido tantos tomos, se merece llegar hasta el final.
Comentarios
SPOILERS ON
¿Extraterrestres y el fin del mundo? ¿En serio? WTF
SPOILERS OFF
En fin. Tony Harris es uno de mis dibujantes favoritos. A todos los interesados, les recomiendo Starman, el mejor comic de superhéroes de la última década. HE DICHO !!
No he leído Ex Machina de Vaughan (está entre los pendientes que tengo), pero sí leí completo "Y The Last Man", y a pesar que me encantó, como que al final sentí el resultado medio forzado...Igual ojo me parece espectacular.
Al parecer es lo mismo con Ex Machina...el final aparentemente es medio flojo.
Será que Vaughan empieza recontra pilas sus historias, y luego no sabe acabarlas?
Alguién ha leido más de él?
Slds,
Hernán
Runaways - En especial el primer volumen.
Pride of Baghdad - El mejor final que Vaughan ha escrito (aunque un toque sermonero)
The Escapists - Inspirado en el libro de Michael Chabon
Dr Strange: The Oath - Vale por el dibujo de Marcos Martin
Y al final, le tengo cierto afecto a The Hood (el personaje de Marvel que Vaughan creó), pero no me parece que entra entre sus mejores chambas.
Volviendo a Ex-Machina, estimado Hernán, te la recomiendo, es realmente bueno.
Gianco, Pride of Baghdad es de Vertigo verdad?
En tu nota explicas bien -de manera simple y clara- los dilemas principales del protagonista a lo largo de la serie, y la lógica de la historia, es una buena sinopsis.
Por el momento, este material seguirá en mi lista de espera (bueno ya que andan con recomendaciones de Vaughan, recomendaré lo único que he leído de él: el número #28 de Tom Strong, una historia autoconclusiva protagonizada por el robot Pneuman, en la que se rinde homenaje al personaje computarizado Hal 9000 del libro 2001 Odisea en el Espacio de Arthur C. Clarke y a la novela Yo, Robot de Asimov).